¡Los 100 Primeros! 💯💯
89…92…103
Ya somos 100+ valientes que hemos abrazado la transformación con el Diplomado DivinoDinero. Una gran aventura.
Imagínate…
Era Noviembre del 2016, cuando a los primeros 15 minutos de mi sesión VIP , Beth, una de mis mentoras soltó la frase: “Yo creo que lo tuyo es el tema del dinero”.
Se me retorció el estómago. Pero 10 minutos después, cuando Beth me dijo: “voy por un café, en esta hoja escribe todo lo que sabes del dinero”.
El dinero es una habilidad, empecé.
Pronto las letras fluían, parecía que yo tomaba dictado. Beth, con la quijada en el suelo, compartió: “¿Sí te das cuenta que este es un modelo de coaching y transformación?”.
En enero del 2017, puse un tímido post en mi Facebook personal: “Daré un curso de dinero, para diez personas, interesados INBOX”. El taller se llenó en 4 días. La segunda generación llegó en Semana Santa, en vacaciones.
Tras bambalinas, el logotipo de DivinoDinero era creado en Miami, por la genial mente de otra valiente egresada de este fantástico diplomado.
Ya con la propiedad intelectual, registro de marca y el primer sitio de miembros, recibí en tercera edición a representantes de: México, Colombia, Perú, España, Chile, uff. DivinoDinero facturaba por primera vez, un poco más que mi trabajo corporativo. Me despedí del godinato a las dos semanas.
Luego se me subió la soberbia. Me resistí por meses a abrir las inscripciones porque “¿qué tal que se inscriben menos personas?”. Abracé a seis espíritus bravos; con la generación cuatro, exorcicé la significancia de los números.
Vino un rediseño pedagógico y en experiencia de usuario. Con foco en desarrollo de habilidades, los nuevos valientes atraviesan por 8 Divinas Habilidades. Lecciones cortas, audios, material de trabajo. El nuevo sitio PRECIOSO.
La generación cinco, con la paciencia del Santo, cursó en dos plataformas diferentes. Grabé más de 40 nuevos videos; DivinoDinero se fue hasta Panamá y Francia.
Durante mi retiro en Florencia, se inscribió la primera alumna en avanzada de la generación seis. Desde entonces coincidimos alrededor de la fogata, los miércoles, estudiantes en diversos momentos de su travesía.
En diciembre del 2018, la generación siete empezó a reunirse. Mi primer colaborador mágico aceptó unirse a las filas. Yo alineé mentalidad y corazón.
Ha sido un viaje muy emotivo. He visto parejas hablar por fin de dinero. Mujeres negociar aumentos de sueldo. Valientes publicar su primer libro; liquidar pagos de tarjeta de crédito, realizar compras importantes, pagar vacaciones internacionales.
He recibido familias enteras a realizar este arrojado trabajo. Otros se cambiaron de casa, en la playa; nacieron nuevos bebés que van a heredar buenos genes monetarios.
Me he maravillado de ver un movimiento de Fortuna, crecer y manifestarse ya en diez países.
He leído emotivos mensajes como alguien que después de un diagnóstico terminal, se inscribió para “resolver en esta vida el tema de dinero y no heredarlo”. He tomado de la mano a esos espíritus bravos, al abrir fondos de inversión, comprarse zapatos nuevos sin culpa, recibir monedas de lugares inesperados, firmar testamentos.
Hoy estamos con la estructura lista, un Diplomado con la retroalimentación y afinaciones después de +103 alumnos. Construyendo evidencia de nuestra nueva identidad monetaria.
Vamos caminando firme hacia la conquista de nuestra fortuna personal.
Es mi genuino anhelo, normalizar las conversaciones de dinero entre las personas de habla hispana. Quiero un mundo diferente para mi Sibarita: lo construyo todos los días.
Gracias infinitas a ti, por formar parte de este Movimiento #DivinoDinero.
Abrazo,
Jess.
P.S. Si estás en un momento similar al que yo estuve en Noviembre del 2016, en la transición de idea a primeros clientes, en el segmento de servicios (sector desarrollo personal) escríbeme. Hay tres espacios para coaching personalizado, en el programa VIP Presencia Plena. Tendrás toda mi energía, 20 años de experiencia en marketing y ventas, mi energía, estrategia y cerebro a tu entera disposición. jessica@jessicavazquez.com y conversemos. Yo puedo ayudar a que inicies tu propio movimiento.